Una aventura es una experiencia emocionante o inusual. También puede ser una empresa audaz, generalmente arriesgada, con un resultado incierto. Las aventuras pueden ser actividades con cierto potencial de peligro físico, como viajar, explorar, hacer paracaidismo, escalar montañas, bucear, hacer rafting o participar en deportes extremos.

El término también se refiere en sentido amplio a cualquier empresa que esté potencialmente plagada de riesgos físicos, financieros o psicológicos, como una empresa comercial u otros proyectos importantes de la vida.